domingo, 4 de septiembre de 2016

Dune, la habitabilidad de un planeta desértico.

Frank Herbert es un novelista de ciencia ficción muy exitoso, especialmente con su saga de novelas Dune, en la que se describe un distante futuro con una sociedad feudal interestelar, formada por diferentes casas de nobles que luchan por el control de los planetas y sus recursos:

"Había tantas cosas que aprender. Arrakis era un lugar tan distinto de Caladan que la mente de Paul se perdía ante su solo pensamiento. Arrakis... Dune... El planeta del desierto."

Así podría ser un planeta del tipo "Dune". (Fuente: http://es.dune.wikia.com/)

A menudo los estudios de habitabilidad asumen planetas cubiertos por océanos con abundante agua líquida, como la Tierra. Si el planeta está lejos de la estrella el efecto bola de nieve puede dejarlo congelado. Si está demasiado cerca el vapor de agua llena la atmósfera, contribuyendo a un efecto de invernadero descontrolado que termina evaporando el agua de los mares del planeta. Los planetas demasiado calientes terminan perdiendo el agua.

Pero sabemos que en las enanas rojas durante su prolongada pre-secuencia principal mantienen una luminosidad mucho mayor (a menudo cientos de veces mayor) que la que tienen durante el periodo de la secuencia principal. Es decir, la Zona Habitable de las estrellas frías y pequeñas se va acercando a la estrella a medida que ésta madura. Como consecuencia de esto, los planetas que durante la secuencia principal están en la Zona Habitable, pueden haber pasado por un periodo prolongado previo dominado por un efecto invernadero descontrolado en el que no es fácil que el planeta haya retenido mucho agua.

Planetas del Universo de ficción Dune. Arrakis (Dune) es el planeta de la izquierda (Fuente: wikipedia)


Podemos imaginar un tipo de exoplaneta que sólo tiene una pequeña cantidad de agua, sin océanos. Este planeta estará cubierto por extensos desiertos, con zonas acuosas muy localizadas. Estos planetas desérticos son llamados planetas del tipo "Dune", porque el Dune de las novelas de Frank Herbert supone un buen ejemplo para este tipo de planeta.

Dune es como un Marte cálido, con oxígeno respirable en la atmósfera. Como Marte, el Dune de la novela es un planeta seco, pero con signos de un pasado mucho más acuoso. Dune tiene casquetes polares de agua y acuíferos cercanos, con unos trópicos extremadamente secos. Si Marte tiene similitudes con planetas del tipo Dune, también Titán, la luna de Saturno, tiene puntos en común. Titán, como sabemos, tiene lagos (de hidrocarburos) en los polos separados por extensos desiertos tropicales.

Otra representación artística de Dune. (Fuente:Wikipedia.)
En 2011 Yutaka Abe estudió un planeta "Dune" con un modelo climático 3-D que determinó que este tipo de planetas podían estar tan cerca como 0,77 UA en una estrella del tipo solar, algo así como la distancia de Venus. Es decir, un planeta de este tipo podía llegar a soportar situaciones de irradiación extremas sin perder su habitabilidad. Si el planeta mantenía una oblicuidad reducida podía retener algo de agua en sus zonas polares.

El planeta Dune de la novela de Frank Herbert, aunque es un planeta de ficción, pone de manifiesto cuestiones fundamentales sobre la habitabilidad planetaria:

¿Cuánto agua es suficiente? ¿Cuánto agua es demasiado?

No me resisto a incluir este curioso esquema de un habitante de Dune. El colosal gusano de arena de varios kilómetros de tamaño. (Crédito: David Stein)


Esta entrada forma parte de la serie "Ecosistemas de la Galalxia". Otras entradas de la serie:


2011. Yutaka Abe estudia la habitabilidad de los planetas del tipo “Dune”.

2014. Un magnífico estudio de Ramsés Ramírez y Lisa Kaltenegger sobre la habitabilidad de los planetas durante el periodo previo a la secuencia principal.




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